Fuera mitos sobre los lobos
5 stars
Imaginad un grupo de lobos. Imaginadlos en un bosque, en una pradera o en las frías montañas eurasiáticas o de América del norte. Imaginad una pareja de lobos guía, unos cuantos jóvenes adultos (algunos descendientes de la pareja guía y otros emigrados desde otros grupos), algunas crías y algún lobo viejo. Muchas personas tenemos una idea equivocada de la organización social de los lobos. Hay evidencia científica de sobra para desmontar todos los falsos mitos sobre los lobos. En muchos ambientes de la “manosfera”, estos animales se han convertido en un artefacto ideológico para ensalzar la masculinidad y la jerarquía entre géneros en los seres humanos. Pues bien, este libro desmonta uno por uno estos falsos mitos creados para ser utilizados como herramienta ideológica y, además, lo hace de una manera que cualquiera pueda entenderlo. No hay nada mejor para comprender el funcionamiento de una sociedad que ponernos en la …
Imaginad un grupo de lobos. Imaginadlos en un bosque, en una pradera o en las frías montañas eurasiáticas o de América del norte. Imaginad una pareja de lobos guía, unos cuantos jóvenes adultos (algunos descendientes de la pareja guía y otros emigrados desde otros grupos), algunas crías y algún lobo viejo. Muchas personas tenemos una idea equivocada de la organización social de los lobos. Hay evidencia científica de sobra para desmontar todos los falsos mitos sobre los lobos. En muchos ambientes de la “manosfera”, estos animales se han convertido en un artefacto ideológico para ensalzar la masculinidad y la jerarquía entre géneros en los seres humanos. Pues bien, este libro desmonta uno por uno estos falsos mitos creados para ser utilizados como herramienta ideológica y, además, lo hace de una manera que cualquiera pueda entenderlo. No hay nada mejor para comprender el funcionamiento de una sociedad que ponernos en la piel metafórica de algunos de los lobos a los que Elli H. Radinger ha seguido durante lustros en Yellowstone y en la Selva negra.
El primer mito a desechar es el del lobo alfa y la hembra alfa (por su puesto, en este mito quien mandaba es el macho alfa). La sociología de los lobos funciona con una pareja guía y su poder no es el poder omnímodo de un dictador, sino que su capacidad de liderazgo se ejerce a través de lo que Max Weber llamaba autoridad tradicional o, lo que es lo mismo, por el buen hacer, por la crianza amable, por sus victorias durante la caza y en la batalla con otras manadas rivales. Liderazgo carismático. Radinger muestra este liderazgo con la siguiente imagen. Un grupo de lobos que avanza sobre los límites de su territorio. La pareja guía no va delante, sino los lobos jóvenes que viven con la manada. Son más fuertes y ágiles por su juventud. Exploran el territorio en búsqueda de amenazas. Por detrás, o a los lados, o jugando, avanzan otros jóvenes con los más pequeños. Quizá otros jóvenes y algún lobo viejo estén también en esta parte más compacta del grupo. De repente, se adentran en una zona desconocida o un olor pone en alerta a los jóvenes exploradores. Es en ese momento donde el liderazgo aparece: la pareja de lobos guía se pone en cabeza mostrando a los demás qué hacer. Además, no solamente la pareja guía es la que cría. Pueden haber varias hembras dentro del grupo que críen a la vez y los hijos pueden ser de otros machos que no sean del macho guía. Desmitificando que es gerundio.
Otro mito, establecido por Richard Kipling en su archiconocido “Libro de la Selva", es aquel que afirma que el lobo viejo es abandonado por la manada y se le deja morir, destino que el anciano cánido acepta con resignación. Parole, parole, parole. A los lobos viejos y/o enfermos se les alimenta, se les cuida y se les acompaña hasta los últimos días. Algunos lobos, sabiendo de su enfermedad, sí abandonan el grupo para morir. Otros reciben comida predigerida como si de cachorros se tratasen. Pero aquí viene el dato más interesante. Un trabajo encabezado por Kira A . Cassidy y publicado en Yellowstone Science demuestra que los grupos que cuenta con lobos viejos (8-12 años) tienen un 150% más de probabilidades de ganar en un enfrentamiento con una manada rival, independientemente del tamaño de la misma. También tienen un porcentaje mayor de acierto durante las cacerías. Otros aspectos interesantes narrados por Radinger, y que demuestran la adaptabilidad de estos cánidos, son I) la adaptación de algunas manadas a nuevos territorios con presas nada comunes para los lobos (como el bisón americano), II) las grandes migraciones que realizan los adultos jóvenes buscando crear nuevas manadas o pareja dentro ya de una manada y III) la simbiosis que la evolución a esculpido entre los lobos y los cuervos en Yellowston (y la interacción global del ecosistema cuando un lobo consigue abatir una gran presa).
Es una lectura necesaria para cualquier persona que se considere naturalista. Ojalá existieran narraciones en este tono, rigurosas a nivel científico y lietararias en su formato escrito. La ciencia no es incompatible con la literatura y con la composición de imagenes mentales que nos ayuden a combatir a aquellos que utilizan la falacia naturalista para la imposición y la opresión. Más Radinger y menos Kipling hipertrofiado en la manosfera.