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Parece que Cristina Peri Rossi inventó el lenguaje. "El lenguaje debió de nacer así, de la pasión", dice. ¡Sí! La pasión nos lleva a inventar todas las metáforas. Peces en el agua, animales varados, cuerpos dados la vuelta, saliva en la orilla de una boca... amor, palabras, amor.

Cuenta en frases cortas las fricciones, los acercamientos, los fantasmas y los momentos de pura luz de una seducción. Un estado de fragilidad y de una imaginación productiva que solo sirve a lo que Lacasa describe como una campana, el espacio propio de dos mundos que entran en contacto y, durante el tiempo en que se tienen enfrente, se vuelven uno solo.

Voces con la teoría y la práctica descolonial muy integrada en el pensamiento sobre el amor. Necesario.

Algunos días lo leí y luego entré en una espiral infinita de pensar cosas. Supongo que eso es bueno en un libro, pero puedo prometer que también agotador. ¿Cuál es el abismo entre el pensamiento sobre el amor y la reacción del cuerpo? ¿Entre el deseo propio y las expectativas aprendidas? Aaaaah.

Me gusta establecer con los libros una relación de capricho, afectiva en tanto que lo que pienso de y con ellos tiene mucho que ver con la forma en que me he dejado atravesar por la lectura. Exciting Times me ha acompañado en días de cambios, incertidumbres y palabras de amor, y, aunque fuera solo por eso, ya sería un libro con un hueco en mi memoria. Además, me ha hecho reír.

Ernaux se esfuerza aquí —más que en ninguno de los otros libros que he leído de ella— por escribir de forma objetiva, quizá porque lo que cuenta atraviesa sus afectos y su identidad profundamente. Me ha entusiasmado ese esfuerzo y me hace desear ejercitarlo también: esa descripción de las cosas que ocurren que no se deja afectar por la emoción particular pero que, con solo nombrar, consigue analizar muchas de las cuestiones que atraviesan la familia, la clase social y las aspiraciones humanas.

Nettel consigue construir unos personajes detestables cuyas obsesiones, oscuridades y formas de ver el mundo nos remiten a las nuestras, no por similares pero sí por particulares y profundas. En todo eso, hay momentos de luz que son los que consiguen que continúe la vida dentro del libro.