La tendencia de que fueran les usuaries quienes creaban contenido pasó a llamarse Web 2.0 y nos contaron que nos ponía en el centro. Omitieron que nuestro rol iba a consistir en trabajar gratis 24/7 para producir la materia prima más valiosa: los datos.
— Las redes son nuestras por Marta G. Franco (Página 12)