Renée es un ser divino creado en un laboratorio. Pero no se siente como tal. Esta mutante es capaz de regenerar sus órganos por completo en 30 días, así que es usada como una granja humana para quien pueda permitírselo. Sin contar con su opinión. Sin contar con su consentimiento. Por el bien común. Y solo es libre un día de cada 30.
Pero una revolución se está fraguando en la sombra y tiene una fecha, aquella en la que se cambiarán las tornas: Los suyos serán libres, cueste lo que cueste, caiga quien caiga en el proceso, dentro de 250 años. Demasiado tiempo para un simple humano. Muy poco si se compara con la inmortalidad.