La globalización era muchas cosas (incluida una realidad en la que todos los seres humanos vivían en un planeta compartido cuyas fronteras eran puras fantasías históricas), pero también era una forma de colonialismo estadounidense, de imperialismo con guante de seda combinado con un dominio económico en el que Estados Unidos todavía poseía el 70 por ciento del capital, a resguardo en bancos y en empresas, a pesar de que solo representaba el 5 por ciento de la población mundial.
— El Ministerio del Futuro (Biblioteca Kim Stanley Robinson) (Spanish Edition) por Kim Stanley Robinson (37%)