Ifemelu apoyó la cabeza en la de él y sintió por primera vez lo que a menudo sentiría a su lado: afecto por sí misma. En su compañía, se gustaba a sí misma. Con él, se sentía cómoda; tenía la sensación de que su piel se acomodaba perfectamente al tamaño de su cuerpo.
— Americanah por Chimamanda Ngozi Adichie, Carlos Milla Soler