ArianeDeTroil terminó de leer Los asquerosos de Santiago Lorenzo
Tenía ganas -y a la vez cierto recelo- de adentrarme por fin en el hype de Santiago Lorenzo. Al fin y al cabo, algunas de mis fuentes de referencia en materia literaria sorben los vientos por este autor. Lo primero: el estilo. Personalísimo. Alambicado, preciosista, semánticamente redundante a fuerza de amontonar adjetivos y sustantivos para describir cada concepto. No intenten esto en casa: resultarán pedantes y cansinos. Contra todo pronóstico, en seguida se le coge el gusto y casi desearía una que todos habláramos en el estilo de Santiago Lorenzo. Lo segundo: la historia. Una revisión moderna del tropo clásico del beatus ille en continuo riesgo de romper el principio de verosimilitud. Sin embargo, qué narices, a la porra la verosimilitud. A cada página vamos empatizando cada vez más con ese moderno anacoreta disfrutón y sin penitencia. En resumen: que me ha gustado un montón.