No apto para todos los públicos
3 estrellas
El libro hace exactamente lo que promete: una primera mitad (o tercio) en la que explica cómo es la renta básica que defienden los autores, qué ventajas supone, y otra mitad en la que se justifica exhaustivamente cómo financiarla. Para ello, los autores utilizan distintas fuentes de datos, escenarios... y con numerosas notas al pie de página y referencias. Sinceramente, eso es lo que buscaba en este libro. Lamentablemente, el lenguaje utilizado resulta complejo y farragoso en no pocas ocasiones, y para aquellos que somos ajenos al ámbito de la economía política (o en economía, en general) cuesta de entender ya que resulta fácil olvidar a qué se refieren algunos conceptos o acrónimos o se asume cierta familiariadad con los indicadores utilizados, o se desarrollan con exceso cosas que, en mi opinión, tendrían que haber sido anexos, para centrarse en las conclusiones de los resultados. Es también un libro difícil …
El libro hace exactamente lo que promete: una primera mitad (o tercio) en la que explica cómo es la renta básica que defienden los autores, qué ventajas supone, y otra mitad en la que se justifica exhaustivamente cómo financiarla. Para ello, los autores utilizan distintas fuentes de datos, escenarios... y con numerosas notas al pie de página y referencias. Sinceramente, eso es lo que buscaba en este libro. Lamentablemente, el lenguaje utilizado resulta complejo y farragoso en no pocas ocasiones, y para aquellos que somos ajenos al ámbito de la economía política (o en economía, en general) cuesta de entender ya que resulta fácil olvidar a qué se refieren algunos conceptos o acrónimos o se asume cierta familiariadad con los indicadores utilizados, o se desarrollan con exceso cosas que, en mi opinión, tendrían que haber sido anexos, para centrarse en las conclusiones de los resultados. Es también un libro difícil de situar: en ocasiones es más próximo a una publicación académica, pero en el que se hacen determinadas afirmaciones que no tendrían cabida por no estar suficientemente justificada. Todo ello hace que al acabarlo solo tenga claras algunas nociones muy básicas (sí, la renta básica es posible), sin ser capaz de resumir los principales hallazgos. Por otra parte, en numerosas ocasiones me hubiese gustado conversar con los autores sobre determinadas decisiones (por ejemplo: la decisión de no pagar a miembros de la iglesia me parece contraria a la universalidad de la renta que dicen defender, o el hecho de que únicamente se calculen escenarios estáticos). Por estas sensaciones agridulces, es por lo que propongo un 3.