VicenteVF reseñó a Esplendor de Portugal
Leer con precaución
4 estrellas
Tras de muchos años, tras un par de lecturas algo fallidas, regreso a Lobo Antunes con uno de esos libros que merecen mucho la pena, pese a lo arduo que es siempre meterse en el estilo de este autor. Reconozco que en mis, ya no muy cercanos, principios lectores, La muerte de Carlos Gardel, El orden natural de las cosas y Tratado de las pasiones del alma me encantaron, era una nueva ventana a otra forma de contar historias, no una forma que quieras leer a diario, pero sí en dosis adecuadas. El problema viene cuando lo que cuenta no compensa el esfuerzo de lectura, y eso fue lo que me más o menos sucedió con las siguientes lecturas, las dos siguientes que leí a António bueno no eran tan redondas como las mencionadas pero bueno tenían su aquel, en cambio la última digamos que, habiendo tanto que leer, provocó …
Tras de muchos años, tras un par de lecturas algo fallidas, regreso a Lobo Antunes con uno de esos libros que merecen mucho la pena, pese a lo arduo que es siempre meterse en el estilo de este autor. Reconozco que en mis, ya no muy cercanos, principios lectores, La muerte de Carlos Gardel, El orden natural de las cosas y Tratado de las pasiones del alma me encantaron, era una nueva ventana a otra forma de contar historias, no una forma que quieras leer a diario, pero sí en dosis adecuadas. El problema viene cuando lo que cuenta no compensa el esfuerzo de lectura, y eso fue lo que me más o menos sucedió con las siguientes lecturas, las dos siguientes que leí a António bueno no eran tan redondas como las mencionadas pero bueno tenían su aquel, en cambio la última digamos que, habiendo tanto que leer, provocó que estuviera más de diez años sin volver al portugués. Resumiendo, y siguiendo sin decir nada sobre esta obra, y así será hasta el final, reconozco que Lobo Antunes, cuando acierta, y pese a lo difícil que hace la lectura su forma de escribir, tiene obras que alcanza tal altura que, de vez en cuando, caer en sus páginas es un acierto, el problema es acertar que páginas merecen la pena. Bueno y aún acertando, como es el caso de este esplendor, supongo que tardaré bastante en volver a caer en un libro de este eterno aspirante al Nobel. Nota: 8/10.