haciaelabismo empezó a leer La conquista del aire de Belén Gopegui
La conquista del aire por Belén Gopegui
Si en «La escala de los mapas» y «Tocarnos la cara» Belén Gopegui trataba del fracaso de las relaciones, de …
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Si en «La escala de los mapas» y «Tocarnos la cara» Belén Gopegui trataba del fracaso de las relaciones, de …
La escala de los mapas es la historia del miedo a ser amado y su metáfora, y una reflexión sobre …
Esta novela ha sido mi compañera la última semana en el hospital. Solo sé que no he leído nada igual y que, periódicamente, voy a sentir la imperiosa necesidad de releerla de una tacada. Es la primera vez que leo a Gopegui y, por lo que había escuchado a gente, no era para nada lo que esperaba. Qué bonito es el mundo cuando te da sorpresas como ésta. Qué bonito es el mundo con literatura.
@haciaelabismo la voz aún viva, la vida aún voz
Creo que todo el mundo debería leer este libro, que es la crónica perfecta de una situación universal en un momento y lugar concretos. Qué tía más inteligente y qué lucidez (ni que hubiera ganado el nobel). Me ha sorprendido lo actual que es el tipo de escritura, sencilla y fragmentada; también me ha molado mucho cuando habla de porqué escribe el principio de una forma tan distanciada, emulando el distanciamiento que sentía ella en ese momento, y cómo la escritura se va cargando de emoción y significados líricos conforme avanza ella hacia esas sensaciones dentro la narración.
Advertencia de contenido Cuidao, hablo del final
Empecé este libro muy emocionado por lo que prometía: un misil directo a las oficinas de pijos del Avecrem venidos a más y de falsa meritocracia. Y durante todo el libro puedes subrayar un millón de frases lapidarias y muy contundentes en torno a eso. Y en torno a actitudes boomer sobre el racismo o el machismo. Pero solo llega hasta ahí.
En ese sentido, es como leer twitter. Tienes mucho material así durante el libro que te mantiene con ganas de más y te anima a seguir leyendo, pero cuando llegas al final y tiene que demostrar la auténtica sustancia por debajo de la historia, no hay nada. Hay un abandono repentino de todo lo que se ha venido sosteniendo durante la historia para pasar a ser uno más de esos boomers venidos a más. Donde había espacio para un conflicto de clase, de género, de raza, donde se podían explotar todas estas grandes contradicciones del sistema a través de la historia de una chavala con la que prácticamente todas las universitarias de familia obrera del 15M nos podemos identificar, se ha colocado el más cutre de los conflictos generacionales. Viejos acomodados contra jóvenes que quieren acomodarse. Ella, ya acomodada, odiando a la becaria. Porque "ha pasado por mucho y tiene derecho", que nos podrían decir muchos de nuestros padres para justificar sus actitudes de mierda.
Es una pena ponerle 2 estrellas, pero es quizá más culpa de mis expectativas y de mis trasfondo político-cultural que de que ella lo haga mal.
El punto fuerte del libro es la claridad expositiva, y no es poco cuando hablamos de marxismo. Una de las grandes virtudes de Jesús es la capacidad de delimitar muy bien los conceptos y su utilidad y definirlo en unas pocas líneas. Como poco, ya vale para aprender las bases de la crítica de la economía política (y alguna cosita más) y separar el grano de la paja.
Yendo al contenido, su desarrollo teórico es bastante coherente de inicio a fin. Creo que hay posturas en torno al género que podrían estar más terminadas, pero compensa elevando el contenido de debates como el del papel del Estado en el modo de producción capitalista, pasando por encima de teorías utilitaristas y concibiéndolo de forma orgánica con el resto de elementos de la sociedad del capital.
Cuando no eres un teórico, un ejercicio de esta honestidad y que rehuye tanto de mezclar …
El punto fuerte del libro es la claridad expositiva, y no es poco cuando hablamos de marxismo. Una de las grandes virtudes de Jesús es la capacidad de delimitar muy bien los conceptos y su utilidad y definirlo en unas pocas líneas. Como poco, ya vale para aprender las bases de la crítica de la economía política (y alguna cosita más) y separar el grano de la paja.
Yendo al contenido, su desarrollo teórico es bastante coherente de inicio a fin. Creo que hay posturas en torno al género que podrían estar más terminadas, pero compensa elevando el contenido de debates como el del papel del Estado en el modo de producción capitalista, pasando por encima de teorías utilitaristas y concibiéndolo de forma orgánica con el resto de elementos de la sociedad del capital.
Cuando no eres un teórico, un ejercicio de esta honestidad y que rehuye tanto de mezclar churras con merinas es muy gratificante.
En un mundo en el que nuestro valor está determinado por la productividad y el rendimiento, la acción de no …