El judío Jesús y el Shabbat

Marie Vidal, biblista católica, nos invita a esta conversión de la mirada, en esta prolongación de su notable obra, Un judío llamado Jesús. En esta perspectiva, el Evangelio ya no parece como el lugar de la oposición entre la religión de la Ley (judaísmo antiguo) y la del Amor (cristianismo naciente). Es cierto que Jesús proclama que "el Shabbat está hecho para el hombre, y no el hombre para el Shabbat", pero estas conocidas palabras reflejan una sentencia de la tradición oral de los fariseos: Ya que esta tradición incomparable, que más tarde dará nacimiento al Talmud, es también la suya. Jesús ama la Torah porque sabe que las prescripciones están hechas para la emancipación del hombre y no para su sujeción. Jesús ama el Shabbat, y no lo "viola" más que para poner de manifiesto su sentido liberador.